Basada en los mismos principios que la acupuntura, esta técnica utiliza los dedos de la mano para efectuar una presión sobre los puntos sensibles de la piel, con el objetivo de aliviar el dolor y solucionar problemas de salud. Mucho más placentera que la acupuntura y totalmente inofensiva, puede ser practicada por cualquiera que tenga unas nociones básicas sobre los meridianos energéticos del cuerpo. Además de aliviar el estrés y el dolor, a largo plazo pueden conseguirse otros beneficios terapéuticos. Esta guía introductoria ilustrada a todo color explica sus principios básicos, cuáles son los puntos sensibles del cuerpo y cómo aplicar masajes adecuados para cada tipo de dolencia. También ofrece algunos consejos sobre la búsqueda del terapeuta más adecuado y un listado de direcciones de interés.